COVID-19 y digitalización son dos conceptos ligados desde hace meses. El inicio de la pandemia supuso un fuerte impulso en la adaptación tecnológica de una gran cantidad de empresas de diferentes sectores. Y, entre ellos, el inmobiliario, que vio como su actividad quedaba paralizada debido al cierre de oficinas y a la suspensión de las visitas a las viviendas para su venta o alquiler. Sin embargo, ese proceso de transformación hacia un ecosistema digital no fue tan necesario en una rama concreta del real estate: las proptech.
En este sentido, hay que señalar que España es un país de propietarios. En concreto, el 76,7% de la población es dueña de una vivienda, según los últimos datos recogidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que la sitúa en la duodécima posición en el ranking europeo. Este puede ser uno de los motivos que ha impulsado la creación de startups inmobiliarias online. Y, aunque el sector proptech todavía es joven, nuestro país cuenta con 256 empresas de este tipo a cierre de 2020, según los datos que recoge MapaPropTech, el estudio de los Colegios y la Asociación de Agentes Inmobiliarios de Cataluña (API). Sin embargo, esta cifra solo muestra aquellas con un modelo de negocio B2B, por lo que se podrían superar las 300 si se tienen en cuenta aquellas que operan B2C, por ejemplo.
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La importancia de nacer con una base tecnológica
La designación a este tipo de empresas como proptech viene de la combinación de dos conceptos: ‘property’ (propiedad) y ‘technology’ (tecnología), los que sientan la base de su identidad y forma de trabajar. Estas compañías utilizan y se apoyan en la tecnología para mejorar o reinventar cualquier servicio dentro del sector inmobiliario. Esto las convierte en digitales y, por ese motivo, la COVID-19 no las ha influido de la misma manera que a aquellas más tradicionales. Aunque también han visto caer su actividad por la cancelación de las visitas a viviendas, no han tenido que reinventarse para operar en la ‘nueva normalidad’.
“El coronavirus no ha hecho que cambiemos nuestro roadmap tecnológico. En ese sentido, es clave el hecho de comenzar siendo digital y con un fuerte componente en esa línea, en comparación con otras empresas que llevan mucho tiempo operando pero ahora necesitan una transformación. Una cosa es adaptarse y otra es nacer con ese enfoque”, apunta Diego Paradinas, CEO y cofundador de Prontopiso, una proptech centrada en conectar a agentes inmobiliarios y agilizarles todo el proceso de venta de una vivienda. Precisamente, la carencia que presentaba este sector es uno de los motivos por los que han nacido empresas como esta. “Nuestra idea surge hace años, cuando vimos que todo el mundo se estaba digitalizando y el real estate era de los pocos sectores que aún no lo había hecho, a pesar de ser el más grande del mundo”, afirma Albert Bosch, CEO y fundador de Housfy.
Machine learning, big data o blockchain son algunas de las tecnologías que las proptech utilizan para ofrecer esa revolución del sector inmobiliario, por lo que la inversión en este aspecto también es relevante. “Una de las cosas más importantes para nosotros es el data. Tenemos un algoritmo de valoración con el que realizamos un análisis de portfolio de pisos que están alrededor, informamos de si están generando demanda… En definitiva, ofrecemos datos que el agente inmobiliario no tiene por falta de tiempo”, explica Paradinas. Para ello “no es necesario desarrollar algo muy pionero, sino agregar mucha tecnología en una plataforma”.
Además, el componente tecnológico hace posible que puedas conectar el proceso de venta del inmueble con otros aspectos, como el de la hipoteca, la mudanza, los cambios de suministros, los seguros de hogar, etc. “Al final, las proptech hacemos del sector algo más limpio, simple y fácil y, al estar conectado con otros servicios, el cliente obtiene una mayor calidad”, asegura el CEO y fundador de Housfy.
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Las proptech como agilizadoras del proceso inmobiliario
Desde el contacto y la generación del lead de la persona que quiere vender su activo, hasta el final, el momento en el que está todo preparado para firmar la escritura. Las proptech “acompañan durante todo lo que dura el proceso de transacción de la vivienda”, explica el CEO y cofundador de Prontopiso. Estas empresas construyen plataformas que ya incorporan la firma electrónica, la documentación, un sistema de calendario para visitas… “Está todo integrado para agilizar el día a día del agente para que se focalice en la parte más comercial”, añade. Desde Housfy también apuntan en esa dirección. “La tecnología que ofrecemos permite eficientar el proceso y hacerlo más limpio, lo que lleva también a ofrecer precios de mercado más ajustados”.
Pero como cualquier sector joven, todavía tiene por delante algunos retos. “En 2021 van a nacer muchas proptech y eso es bueno, pero también que se conozcan y que las acompañen. Para ello juegan un papel muy importante los corporates, gente que conoce el sector y que, si apuestan por estas empresas, pueden mostrar tranquilidad al resto de inversores y de ventures capital”, señala Paradinas. En la misma línea se sitúan desde API, ya que apuntan como principal barrera la actual cantidad de empresas que están en una fase inicial (estado pre- seed o seed). “Queda dar el salto y que empiecen a aparecer rondas B o C de financiación de forma más habitual. De esa manera conseguiremos un ecosistema más potente y difícil de perder”.
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En definitiva, aunque todavía hay que esperar para comprobar si de la COVID-19 surgirán nuevas proptech, sí parece que estas startups han dado con el modelo de negocio adecuado. Durante la pandemia y, sobre todo, durante los meses de confinamiento, muchas personas han destinado el tiempo a formarse y a captar nuevas aptitudes, entre las que se encuentran las relacionadas con la tecnología y, de forma general, con la digitalización. Los consumidores acuden cada vez más a servicios en línea y, por eso, “ahora, captar clientes cuesta menos, porque entienden mejor nuestro producto, por lo que vender viviendas también está costando menos”, asegura el CEO y fundador de Housfy.
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